Pensamiento presocrático

Escuela Jónica

La escuela Jónica fue una de las primeras y más importantes escuelas filosóficas que tuvo su origen en las colonias griegas de Jonia, ubicadas en la costa occidental de Asia Menor. Esta escuela se caracterizó por su enfoque en la búsqueda del conocimiento a través de la razón y la observación de la naturaleza. Los filósofos jónicos se interesaron por entender el origen y la naturaleza del mundo que los rodeaba, y realizaron importantes contribuciones tanto a la filosofía como a la ciencia, rompiendo con las explicaciones míticas y religiosas sobre el mundo. La escuela Jónica se desarrolló aproximadamente desde el siglo VI a.C. hasta el siglo V a.C., y sus ideas influyeron en gran medida en el pensamiento filosófico occidental posterior.

Principales representantes:

1. Tales de Mileto: Se le atribuye la afirmación de que el agua es el principio y origen de todas las cosas. Además, se le considera uno de los primeros filósofos en intentar explicar los fenómenos naturales sin recurrir a explicaciones mitológicas.
2. Anaximandro: Él propuso que el principio de todas las cosas era el apeiron, una sustancia eterna e indefinida. Anaximandro también realizó observaciones astronómicas y cartográficas, y se le atribuye la creación de los primeros mapas. 
3. Anaxímenes: Discípulo de Anaximandro, postuló que el aire era el principio fundamental de todas las cosas. Según él, el aire podía condensarse y rarefacerse para dar origen a los diferentes elementos y sustancias del universo. 

Escuela Pitagórica

La escuela pitagórica fue en sus comienzos una secta, en la que se mezclaban curiosamente la religión y la ciencia. Creían en la inmortalidad, en la transmigración de las almas, en la salvación individual a través del cultivo de la ciencia, en particular de la ciencia de los números. Se trataba de una especie de comunidad religiosa, dedicada a la meditación sobre los números, sus leyes y misterios.  La gran revelación para la escuela pitagórica fue el descubrimiento de que a cada número correspondía una figura y, por consiguiente, a cada figura un número. Ahora bien, todas las cosas tienen una figura, por lo tanto tienen un número que las define, que las hace tal cosa y no otra: las cosas son números.

Para nosotros los números son símbolos, el tres es simplemente 3, el cuatro, 4; para los griegos, en el tiempo de los pitagóricos, el 3 era un triángulo, el 4, un cuadrado, el 30, un rectángulo, etc., a cada número correspondía una figura. Intentemos explicarlo de la siguiente manera, comenzando con la unidad representada por un punto.

Escuela Eleática

Fue una escuela y una corriente griega de filosofía que se desarrolló en el siglo VI a.C. en Grecia. Fundada por el filósofo Parménides quien fue considerado como su miembro más importante y destacado de la escuela, el cual siempre estuvo en contra de Heráclito manteniendo que el Universo era una esfera indivisible e inmutable y que todos los cambios que sucedían eran una contradicción.

Para los integrantes de la escuela eleática, el universo, tanto en tiempo como en espacio se encuentran más allá de la cognición que se obtiene por medio de los sentidos. Los integrantes de esta escuela se enfocaron en investigar el porqué de la existencia de las cosas investigando la existencia de los seres y la razón de las cosas que ya estaban. Para Parménides, el ser sí existía, y era eternos, nunca cambiaba y negaba cualquier generación o un nuevo ser. Para los integrantes de la escuela eleática, únicamente por medio de la adecuada reflexión filosófica se podía alcanzar la verdad. Para ellos, las observaciones sensoriales tan solo nos daban una visión muy limitada y distorsionada de la realidad que nos rodeaba.

Escuela Sofista

La palabra "sofista" viene del griego sophistes, formado por la unión desophía, "sabiduría", y sophós, "sabio". No se los consideraba maestros de la sabiduría sino profesionales del conocimiento y la elocuencia. 

Los sofistas fueron un grupo de estudiantes y maestros de retórica (el arte del discurso) que vivieron principalmente en Atenas durante los siglos V y IV a. C. Los sofistas no fueron un grupo homogéneo: cada maestro predicaba y enseñaba a su manera, sin un conjunto de reglas o principios que seguir. Los sofistas más famosos son Protágoras y Gorgias de Leontinos. 

Sócrates creía que los sofistas eran sus enemigos intelectuales. Los sofistas poseían un saber enciclopédico y empleaban el debate como método de enseñanza, mientras que Sócrates creía en el diálogo y en las preguntas y respuestas orientadas como método de enseñanza. A partir del siglo V a. C., el término sofista comenzó a emplearse con el sentido de farsante o charlatán. Esto se aplicó no solo a filósofos sino a escritores, poetas, oradores y profesores de retórica por igual.

Escuela Pluralista

Los filósofos pluralistas defienden la idea de que la realidad es diversa y compleja, componiéndose de una multiplicidad de elementos básicos o fundamentales. Los pluralistas rechazaron la existencia de una sustancia única o un principio supremo como explicación de todo el universo. La coexistencia de varios elementos primordiales es la que da forma a la realidad tal y como la conocemos.

Los filósofos pluralistas y sus teorías contribuyeron de manera significativa al temprano desarrollo de la filosofía y la cosmología, influyendo sus ideas de manera notable en el pensamiento de pensadores posteriores. El pluralismo filosófico sigue siendo un importante enfoque en la reflexión sobre cómo es la realidad y cuál es el origen de la diversidad del mundo.

Entre los principales filósofos pluralistas se destacan:

• Empédocles.
• Anaxágoras.
• Demócrito.
• Platón.

Bibliografía